Y es así como el hombre es creado a partir de la masa del maíz. Su carne, su existencia absoluta se debe al nacimiento de aquél dios, cuyo primer latido representa el acto inaugural de la nueva era del mundo. Este hecho conmemora el pacto entre los dioses y los habitantes de la tierra, asegurando el sustento y la preservación de la raza humana.
Junab’Kú o Jun Nal Yé, dios del Maíz |
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